domingo, 25 de junio de 2017

Pedrogão Grande: ¿una tragedia inevitable? - uma tragédia inevitável? - une tragédie inévitable?

Bom dia


Hacía tiempo que venía preparando un artículo sobre nuestro país vecino, Portugal. Iba a ser un artículo pensado para recorrerlo, para conocer a sus gentes y a sus pueblos, los de la Raya (la frontera) y más allá. Un artículo parecido a otros que dedico al turismo y a los viajes por Francia y Portugal en el Blog de la Asociación de Hermanamientos de la Villa de Hoyos.


Pero ahora mismo la actualidad manda y he decidido retomar los artículos sobre los incendios forestales que dejé aparcados e inacabados hace casi un año y que podéis seguir en el citado blog. (Como este, que viene muy al caso Los Incendios Forestales y sus Causas).


El día de la tragedia de Pedrogão me encontraba en el pueblo de mis padres, una localidad de poco más de 500 habitantes en el Norte de la Alta Extremadura, a unos 40 Km de la raya (frontera) con Portugal. Allí habitualmente se escucha mal la radio, especialmente las emisoras nacionales españolas, pero las portuguesas entran como un cañón. Y yo siempre que puedo escucho estas emisoras. Es una manera de practicar otros idiomas, escuchar otras visiones y los contenidos... bueno las radiofórmulas son muy parecidas en todos los sitios.


Concretamente estaba escuchando RFM, una emisora nacional de música y noticias. A las cuatro de la tarde sonó la alerta de tormenta del smartphone y a los 10 minutos ya estaba lloviendo y granizando. Cayeron varios rayos en la torre del Ayuntamiento, a escasos 30 metros de mi casa. Cuando volví a escuchar la radio ya estaban anunciando el desastre. 

Villa del Campo bajo la tormenta
Las primeras noticias eran confusas. Se hablaba de 25 muertos cerca de una autovía o de una carretera tipo IC (similar a carretera comarcal). Poco a poco se fueron aclarando las noticias (o yo me fui enterando mejor) y el motivo resultó ser un incendio forestal. Al poco tiempo se encontraron a los que habían escapado de los vehículos... actualmente van por 64 los fallecidos.

Al día siguiente por la tarde el cielo estaba extrañamente amarillo, el sol casi no se veía y la temperatura cayó de golpe entre unos tres y cuatro grados. En el tiempo de TVE dijeron lo de la bajada de temperatura pero ningún meteorólogo la relacionó con las cenizas del incendio que en ese momento ya habían alcanzado el Oeste de España.


Esa tarde la RFM retransmitía como si tal cosa el partido de fútbol Portugal-Méjico de la Copa Confederaciones... (resultado 2-2). Volveremos al fútbol más adelante.


Imagen del visualizador WORLDVIEW de la NASA del Domingo 18. En rojo y a la izquierda los focos activos del incendio. La columna de humo con forma de media luna cubría ya Hoyos y Acebo y se aproximaba al pantano de Borbollón (la pequeña mancha oscura a la derecha)


En otra ocasión ya dije que estos temas es mejor tratarlos en frío. Pero esta vez no. Y es que hay cosas que hay que decirlas en caliente a riesgo de no decirlas nunca.

Analizando los medios de comunicación lo primero que me llamó la atención es que, cuando en los noticieros portugueses se fueron a entrevistar a las distintas autoridades o cuando empezaban a despuntar las primeras hipótesis sobre el origen del siniestro, lo primero que se detectaba es cierta "tranquilidad o resignación" porque el incendio no había sido provocado: Había sido por causas naturales, una tormenta o trovoada (lo de la resignación es porque la causa natural se puede asimilar a divina). Ultimamente parece que han encontrado indicios de que fue provocado.. como si esto fuera lo más importante.


He recorrido en varias ocasiones la IC-8. Desde Coria es la carretera habitual para dirigirse a Coimbra o Figueira da Foz. No hace menos de tres meses que hice ese recorrido. Desde el punto de vista de un profano se trata de una vía rápida situada entre montañas con un paisaje espectacular de pueblos y bosques de pinos (si no están quemados). Pero un forestal sólo ve una cosa: Combustible.


Por eso yo me atrevo a decir que el fuego sí ha sido provocado, pero ¿por quién?

Retomando todo lo que dije en su día sobre el incendio de la Sierra de Gata en 2015 habría que hacer un paralelismo entre España y Portugal en lo que respecta a los factores que influyen y provocan los incendios forestales.


Climáticamente el Portugal al Norte del río Tajo es como una prolongación de la Sierra de Gata (Extremadura, España) y la de Malcata (Castelo Branco, Portugal), más húmedo conforme nos acercamos al atlántico. La vegetación es similar ya que ese aumento de humedad compensa la reducción de la altitud hasta llegar al mar. Es como varias Galicias una tras otra.


En los aspectos sociales también encontramos muchas similitudes. El mismo despoblamiento rural se produjo en Portugal y en España antes, durante y después de sus respectivas "transiciones" pero con una diferencia notable. Mientras en España la mayoría de la emigración se iba a otras zonas de la península, en Portugal el destino era más frecuentemente al extranjero, en especial Francia. Por tanto me atrevo a decir que el desarraigo ha sido mayor en Portugal y los niveles de retorno, por tanto, han sido más bajos. Encontramos así una población rural escasa y envejecida.

Foto del incendio de Villanueva de la Sierra publicada por el Diario Extremadura el día 19 de junio. Más que llamar la atención sobre el fuego quiero que se fijen en la edad de las personas que aparecen en la foto...

Si unimos esto a una división administrativa más parecida a la de Francia con multitud de núcleos urbanos de escaso poblamiento y una urbanización más dispersa ya tenemos el cóctel servido.

¿Y cómo se ha llegado hasta aquí? Vamos a ver más similitudes.

Ambos paises pasaron de sendas dictaduras de economía capitalista (esto no hay que dejarlo de lado) y por procesos similares, revolución en una (1974), transición en otra (1975) a dos democracias también capitalistas. En ambas se dejó gobernar a la izquierda a cambio de que hiciera política de derechas, con una fuerte intervención de fondos y administraciones extranjeras1. Ambos países fomentaron la emigración de las zonas rurales por distintos motivos, pero generalmente económicos.


Aquí si hay una diferencia a mi parecer: Mientras en España se ha conseguido un cierto retorno al terruño de aquellos que emigraron cuando eran más jóvenes, en Portugal la emigración, que en la época de Salazar era más bien perseguida (los caciques necesitaban abundante mano de obra en las zonas rurales a fin de abaratar su coste) fue posteriormente fomentada pensando que a la larga traería inversiones y riqueza al País.

Esto devino en un rotundo fracaso2.

La mayoría de portugueses o no regresaron o lo hicieron a los entornos de Lisboa y Oporto y otras zonas costeras más prósperas No hubo ninguna nueva inversión y en contadas ocasiones trajeron su saber-hacer aprendido en los países de destino (Francia, Reino Unido, Brasil, etc...). Como mucho se hicieron su casa para volver en los periodos vacacionales como se pueden ver en muchos pueblos de la comarca de Ribaçoa tan próximos a la raya cacereña y salmantina. Son esos chalets que permanecen cerrados casi todo el año y que dan algo de trabajo a los paisanos que los mantienen.


Esto no cambió tampoco con la entrada de ambos países en la CEE en 1986. Si acaso el problema se acrecentó, especialmente en Portugal con la facilidad con que la nueva mano de obra precaria podía viajar a Europa ya sin ningún impedimento. Es fácil encontrar portugueses por toda la costa atlántica y en general por toda Francia. Es de una sana envidia ver como nuestros convecinos de la Raya, de Foios, de Soito, de Sabugal, de Sortelha hablan perfectamente el francés cuando nosotros apenas lo chapurreamos con nuestros pueblo hermanado de Sainte Verge.


Y ya dentro de la UE, las políticas austericidas con sus consiguientes recortes también se dejaron notar en los dos países, especialmente en las regiones más pobres de las cuales las de La Raya o Raia Luso-extremeña (que separa, o une, las regiones de Extremadura en España y Centro y Alentejo en Portugal) son las que casi siempre van a la cabeza en este aspecto (según Eurostat).


Las soluciones que han empleado ambos países con los abundantes recursos de los programas de fondos europeos han sido casi idénticas. Me referiré ahora a tres líneas muy en boga actualmente: El fomento del turismo, el de las infraestructuras viarias y el de las digitales (internet).


*Sobre los problemas del turismo con los incendios forestales en las zonas rurales busquen en el blog que les he citado. Ya hay suficientes datos que relacionan el turismo de masas (también el rural) con los incendios forestales. En este caso hay que señalar que la tragedia de Pedrogão se produce en unas fechas en las que todavía no ha llegado el aluvión de emigrantes que suele coincidir con el inicio de las vacaciones escolares en Francia. Por eso también lo atípico de este suceso en estas fechas y la influencia de la climatología.

*Las infraestructuras viarias, muchas innecesarias o sobredimensionadas al final han enriquecido a unos pocos y han endeudado a los dos Estados hasta niveles insoportables, especialmente a Portugal con proyectos faraónicos como la Autoestrada A-24 Viseu-Coimbra que llega a los 1070 metros de altitud, de peaje y con apenas tráfico, lo que provoca que al final las tenga que subvencionar el propio Estado. Vías de comunicación que en vez de facilitar el acceso a ciertas comarcas las han despoblado más rápidamente.


*Internet en muchas zonas de España y Portugal ha sido la "varita mágica" que ha permitido el desmantelamiento de la Estructuras Administrativas Rurales, especialmente la agrícola y forestal. Hemos tardado mucho en darnos cuenta que ni los incendios se apagan vía internet ni el monte se mantiene telemáticamente si no tenemos gente que coja la manguera o la azada. También necesitamos personal técnico que sepa extraer conocimientos en el mundo rural. En Extremadura (y en España) hemos desatendido así nuestros propios estudios que llevaban a incidir en la descentralización de la Administración Rural3 También desatendemos las medidas adoptadas por la Comisión de Entidades Locales del Senado de España en 2015 para luchar contra la despoblación4. Todo sea por la austeridad y el cumplimiento del déficit que reclama Bruselas. Así sólo hacemos que agudizar el problema de esa "España Vacía" que retrata muy bien un libro muy reciente5.


Tampoco nos vamos a olvidar de la PAC y de las medidas de abandono de tierras agrarias (de las forestales no hacía falta, ya estaban abandonadas). Medidas destinadas a reducir el número de agricultores (y silvicultores) y al final a despoblar las zonas rurales ya que estas medidas van más bien destinadas a los latifundios de las zonas llanas que a los minifundios de las zonas de montaña.

Los Fondos Europeos destinados a las explotaciones forestales siempre han sido más escasos y han estado más desigualmente repartidos. En el caso de Extremadura han sido las grandes fincas (frecuentemente dehesas y alcornocales) los más beneficiados en detrimento de las pequeñas explotaciones de montaña.


Y ya tenemos el completo: Despoblación, austeridad, políticas equivocadas o simplemente inexistentes, desmantelamiento de la administración. Tampoco quiero olvidarme de otros actores como el cambio climático debido también a una política energética y de infraestructuras dictada por las grandes empresas y cuyos peores efectos tardaremos todavía en padecer (el CO2 acumulado puede rertrasar sus efectos hasta 30 años. Si, todavía nos queda mucho calor por pasar).


No voy a ocultar mis simpatías sobre el denominado "Bloco de Esquerda" que gobierna ahora en Portugal, cuyos éxitos ocultan descaradamente los medios de comunicación en España ya que resultan un "mal ejemplo" para las élites. Aunque no me han gustado las declaraciones recientes de algunos políticos. Pero el problema no lo han generado ellos, viene de muy lejos y tardará años o décadas en solucionarse. Y el problema es que no tenemos mucho tiempo.


Todavía no he hablado de los medios de extinción, y es que no es el problema de fondo. Hace años, con menos medios, pero con comunidades rurales bien estructuradas, con agricultores, selvicultores, ganadería adaptada, con población joven, no había grandes incendios o eran más escasos. 
Había otros problemas que se han querido solucionar con la emigración (y la despoblación). 

Hay incluso estudios que relacionan la abundancia de medios con los grandes incendios (la llamada "paradoja del fuego"). Pero Portugal orgulloso de su ejército, artífice de la revolución de los claveles, podría dejar de adquirir carísimos carros de combate Leopard II que, al igual que en España, son inservibles en países montañosos, o renunciar a modernizar sus cazas F16 (500 millones de euros) y que la fuerza aérea pasara a operar algún hidroavión Canadair como en España. 
Es más, Portugal, cuyo único enemigo estratégico podría ser... España, podría permitirse prescindir de parte de su ejército transformándolo en un cuerpo de emergencias (como la española UME) o de paz. Portugal en este aspecto podría ser como Irlanda ¿Se lo permitiría la OTAN?

Y es que no hacen falta muchos medios para un operativo eficiente, pero si que esté bien dimensionado y que sus componentes estén bien motivados. Es más, siendo un problema de Estado y en un pais pequeño como Portugal, yo integraría a todas las fuerzas de seguridad y especialmente a los cuerpos más especializados de las fuerzas armadas como es el caso de los pilotos de aviación y helicópteros y el de los cuerpos de ingenieros y zapadores, capaces de llegar a cualquier sitio. A lo mejor yo cambiaría todas las ametralladoras y lanzacohetes de los helicópteros por los conocidos Bambis (o heli-baldes). También confiaría en los militares para las comunicaciones y evitar así queestas no se caigan como parece que pasó en las primeras horas del incendio de Pedrogão.

Resumiendo: 3 o 4 hidroaviones o avionetas de carga en tierra, algunos helicópteros de extinción tipo Kamov como los que operó la desaparecida EMA (Empresa de Meios Aéreos S.A.) más helicópteros ligeros de transporte de cuadrillas, gestionados todos estos medios por una empresa a ser posible pública o por el propio ejército, y la plena cooperación y coordinación con el resto de fuerzas de seguridad. La creación quizá de una Unidad Militar de Emergencias. No hace falta nada más. 
Pero como los incendios se apagan desde tierra, lo más importante son los medios terrestres: Los sapadores florestais y los bombeiros voluntarios, que, a pesar de su nombre, son unos magníficos profesionales, pero necesitan más atención, más medios y cierta estabilidad laboral que los convierta en profesionales más incentivados y que atiendan a labores de prevención todo el año. 

¡Y que vuelvan los Agentes Forestales, por favor!

En una de mis visitas a Portugal en 2015, poco después del siniestro de Sierra de Gata (8.000 hectáreas calcinadas, tres pueblos evacuados pero afortunadamente ninguna víctima mortal) pude ver en una cadena de televisión el estado de algunas cuadrillas. En ese programa se denunciaba incluso la fatiga y el hambre que pasaban. Esto es suficiente motivo para agradecerles aún más la ayuda que prestaron en Extremadura en 2015 los bombeiros del entorno de Castelo Branco.

Pero, aunque contemos con todos los medios de extinción estos, por sí sólos, no podrán acabar con el problema.


Y si no miren a España. A pesar de las triunfales declaraciones de nuestros políticos y de nuestra opacidad a la hora de publicar los gastos de extinción6 la superficie quemada cada año de media es más o menos la misma desde hace dos o tres décadas, pero los gastos de extinción se han disparado a pesar de descensos en los años de "vacas flacas". Es lo que en algunos medios se viene denominando el "complejo comercial-industrial del fuego" por aquello del complejo militar-industrial que denunció el presidente de los EUA Eisenhower. Eso si, los fuegos han aumentado en severidad, cada vez se acercan más a los núcleos urbanos (todos los años hay que evacuar una o varias poblaciones) y lo que se denominan Grandes Incendios Forestales (GIF) cada vez son más frecuentes.


Porque como dije antes, los medios de extinción son importantes cuando los incendios ya se han declarado pero hay mucho trabajo por hacer el resto del tiempo.


Lo primero son los planes y equipos de emergencia: Cada pueblo o freguesía debe de contar con un plan de emergencias que, en el caso de poblaciones o núcleos pequeños hay que darlo a conocer a cada vecino, es decir, no se puede quedar en el papel: Qué hacer, vías de escape, refugios, donde llamar, donde ir y sobre todo DONDE NO IR.


Pero una vez que contáramos con unos medios de emergencia adecuados y con unos medios de vigilancia y extinción eficaces ahora hay que llegar al problema fundamental: La transformación de los bosques (la floresta) en un entorno más seguro para nuestras zonas rurales. Y tenemos una herramienta que en el entorno ibérico conocemos muy bien: La Selvicultura o Silvicultura.

No voy a hablar aquí de una ciencia o herramienta que está muy estudiada tanto en España como en Portugal y de la que se hablará mucho en el inmediato Congreso Forestal Español (Plasencia, junio de 2017). Existen suficientes profesionales en ambos países e incluso me atrevería a decir que la extensión forestal está más avanzada en Portugal viendo los excelentes manuales que allí se editan7.


Pero aquí también hay diferencias:

En Portugal la Administración está más centralizada lo cual puede ser una ventaja a la hora de la extinción o en situaciones de emergencia declarada, pero no a la hora de la prevención o gestión en los montes. Encontramos también una selvicultura demasiado centrada en el alcornoque (sobreiro) y poco en los pinos como el pinaster (pino resinero o pino bravo). Así los madereros portugueses frecuentemente tienen que venir a España o a Francia a buscar la madera que falta en su país porque allí habitualmente se encuentra quemada o no tiene la suficiente dimensión para su aprovechamiento.


Otra figura determinante para la gestión de los montes es la del Monte de Utilidad Pública, que existe en España pero que en Portugal creo que se reduce a lo que se denominan Matas Nacionais8. En estos montes de propiedad y gestión públicas se invierte muy por encima de la media en actuaciones con el fin de, entre otros, reducir los incendios y sus daños. 
Pero haría falta mucha más superficie y, no nos engañemos, también hacen falta muchos fondos. Fondos que, a pesar de que son ridículos comparados con los que se emplean en otras áreas como carreteras, son muy altos comparados con los que se destinan a los montes privados, que son la mayoría de la superficie que arde tanto en España como en Portugal.


Y es que es al final lo que resulta es que es muy caro mantener el medio rural despoblado. Y no podemos destinar ingentes fondos de subvenciones si no hay nadie que las reciba o caen en manos de rentistas o "caza-subvenciones". De hecho, últimamente la mayoría de fondos se destinan cuando los montes arden, en lo que se denomina "post-incendio". También se conoce esto como política "reactiva" (de reacción). Es el famoso dicho "sólo nos acordamos de santa Bárbara cuando truena".


Ya he citado muchos de los problemas que aquejan al medio rural en esta vertiente más trágica que son los incendios forestales. Pero ahora volvamos al tema de los culpables: Si hemos recapacitado sobre todo lo anterior ahora ya es más difícil ponerle cara ¿a que si?. 

Ya citamos que en los incendios lo más socorrido es echar la culpa a la climatología (los rayos, el viento, la sequía, etc...) o a algún incendiario y así suelen hacer las autoridades. De hecho en el Incendio de Sierra de Gata todavía se sigue buscando al culpable. Pero si en una situación anunciada 30-30-30 (que significa más de 30ºC de temperatura, menos de 30% de humedad, más de 30 Km/hora de velocidad de viento) dejas que en una Piscina Natural se aglomeren 1.500 personas a las 15:00 horas ¿quién es el culpable?


Me viene en este momento a la memoria un artículo que me pidieron que escribiera en el blog en 2015 sobre los atentados en Francia de aquel año. Es este: Je suis Charlie, je suis Paris, je suis... Allí destacaba la falta de atentados en Portugal, quizá por su condición de país "marginal" o por su falta de beligerancia en este tema (a pesar del escenario de la infame "foto de las Azores" de 2003).


También comentaba el doble rasero de los medios con las víctimas. Porque cuando un ataque se produce en un país occidental o con víctimas occidentales y éste lo ejecuta un grupo organizado, a ser posible en nombre de un país u organización pobre o del tercer mundo, en seguida es tachado de terrorista. Una persona que causara un incendio con la voluntad de asesinar a 64 personas podría ser tachado de terrorista o asesino (un lobo solitario) según haya reivindicaciones políticas o no.

Ahora, si se produce ese número de víctimas inocentes por parte de un ejército organizado de nuestro país o de un país u organización aliada, democrática o no, pero normalmente capitalista, o incluso de una empresa o corporación, tenemos un abanico muy extenso de palabras entre las que no se incluyen ni terrorismo ni asesinato: Las guerra occidentales son humanitarias, las víctimas son colaterales, las muertes por causa mayor u homicidios involuntarios... si se trata de los terroristas estos nunca son asesinados, ni siquiera ajusticiados, ni matados. Son abatidos...


Y las víctimas de Pedrogão ¿como murieron? ¿las mató alguien o fue el destino?
No, realmente no tenemos una palabra para calificar estas víctimas.

Para mi si fue el destino, el destino de los parias, el destino de unas zonas rurales empobrecidas y envejecidas, muy lejos de los centros de decisión y de las políticas capitalistas y liberales de Bruselas. Muy lejos de las decisiones estratégicas de la OTAN y de los grandes conglomerados empresariales. Para mi es el mismo caso de las torres que ardieron en Londres recientemente y donde sus vecinos no sospechaban que vivían en auténticas teas a punto de arder. También es el caso de las muertes que va produciendo el fibrocemento en los edificios sin que los sucesivos gobiernos españoles tomen ninguna medida para erradicarlo.


Parafraseando y modificando la famosa frase de las campañas electorales de los EUA en los 90 ¡Es el capitalismo estúpidos!

Pero en este caso podríamos añadir el abandono del medio rural, el abandono del "Portugal vacío" ¿Quién se hará responsable?

Cuando leo los medios portugueses veo mucha gente de mi misma o parecida opinión como los artículos de Jorge Paiva en Público9, pero voy a contar un caso que me ocurrió en una visita a la zona de Aveiro y que hilaré con algo sobre el fútbol que comenté en los primeros párrafos.

En mi primera visita a la costa atlántica portuguesa en agosto de 2003 Portugal ardía por los cuatro costados, sobre todo en la zona que atraviesa la Vía Rápida IP-5 entre Vilar Formoso y Aveiro. El país estaba volcado entonces en la preparación de la Eurocopa de 2004. Ese año se celebraba la Sub-17.


En la localidad de Praia da Vagueira entramos en un restaurante que desde el principio nos llamó la atención. El dueño había empapelado todo el local con frases que rezaban algo así como:

"AQUÍ NO SE RETRANSMITIRÁ LA EUROCOPA"
"MÁS HIDROAVIONES Y MENOS ESTADIOS DE FÚTBOL"
"CUANDO LA SELECCIÓN PORTUGUESA GANA, EL PUEBLO VIBRA. CUANDO PORTUGAL ARDE, EL PUEBLO MIRA PARA OTRO LADO"


A la vuelta de aquel viaje no sólo Portugal seguía ardiendo, en Extremadura se quemaron unas 25.000 hectáreas, 1.500 entre Acebo y Hoyos, nuestra localidad de partida en España.


Aquel portugués me hizo reflexionar, y no es que yo haya sido un gran amante del fútbol, pero desde entonces ya no sigo ni a la selección. Y menos desde que que los grandes equipos de fútbol se han convertido en una suerte de grupo de mercenarios-millonarios que son capaces de cambiar de equipo con tal de pagar menos impuestos como ha sucedido con cierto jugador "hispano-portugués". Pero el pueblo, tanto el español como el portugués, es capaz de justificar semejantes sueldos, incluso el supuesto fraude, mientras se detraen los fondos necesarios en el medio rural, sin darse cuenta que son dos caras de la misma moneda. 

Acabo con una imagen de Lisboa. Es el monumento a los descubridores fotografiado la primera vez que visité esta ciudad en 1994. España y Portugal recurren frecuentemente a su historia y a sus mitos para reafirmarse como naciones y en ocasiones las élites han enfrentado a los dos países hermanos fomentando el miedo al otro. Pero España y Portugal son lo mismo: Los restos de dos imperios en decadencia, manejados por potencias extranjeras y donde las dos capitales y alguna ciudad más manejan el resto como si de un entorno vacío se tratara. Somos los ciudadanos de estas zonas los que tenemos que mantenernos unidos contra el fuego y, por extensión, contra el abandono sistemático de las zonas rurales.



Y es que ambos países se dedicaron a descubrir la américas, pero ahora deben emplearse en descubrir sus propios territorios, cosa que los ciudadanos de a pie, especialmente los de las zonas fronterizas, ya hace tiempo que superamos.


Un sentido recuerdo a las víctimas de Pedrogão.
A memória das vítimas do Pedrogão.
En mémoire des victimes de Pedrogão. 

El texto y las imágenes sin citar son de Pedro Francisco Santos Sánchez
Ingeniero Técnico Forestal y Agente Forestal

NOTAS

1 SOBERANOS E INTERVENIDOS del autor JOAN E. GARCES; CONTOS PROIBIDOS Memória de un PS desconhecido del autor RUI MATEOS (disponible en línea)
2 A DITADURA DE SALAZAR E A EMIGRAÇAO del autor VICTOR PEREIRA
3 DESARROLLO RURAL DE BASE TERRITORIAL -OCDE y Junta de Extremadura. Informe coordinado por Jesús González Regidor en 2006 disponible en red en inglés y en castellano
5 LA ESPAÑA VACÍA del autor SERGIO DEL MOLINO
6 ESPAÑA EN LLAMAS informe de la FUNDACIÓN CIVIO: http://espanaenllamas.es/
7 Por ejemplo este: SILVICULTURA GERAL del autor MARIO A. SILVEIRA DA COSTA
8 ICNF Instituto de Conservaçao da Natureza e das Florestas : Matas Nacionais